lunes, 9 de julio de 2018

PUNK NEW WAVE, Valparaíso 2018.


Mi tercer poemario lleva por nombre PUNK NEW WAVE y lo publiqué de manera independiente a través de Opalina Cartonera.
Este libro trata sobre la vertiginosa estancia sonora y existencial de una ciudad tan particular como es el puerto de Valparaíso. Calles negras y contaminadas por eso aliento tibio del carrete nocturno, vicioso, alcoholizado y lleno de corazones a punto de estallar.
Se vive rápido en este plano y los cambios suelen ser constantes, no existe una sola cuerda sino que el horizonte se deshace en un mar de bifurcaciones. 
Lleva por nombre PUNK NEW WAVE como el poema que abre el libro, una especie de declaración de derechos en femenino donde se nombran un montón de bandas que han sido importantes en mi vida. Así es, la música tiene igual trascendencia en mi escritura como la lectura misma, van unidas, no podría separarlas jamás aunque quisiera. Y así son citados The Cure, Joy Division, My Bloody Valentine, Dead Can Dance, Piano Magic, Cocteau Twins, Virus y otras bandas de mi estancia.
El libro entero se mueve entre ese verdor matutino perdido y las noches de juerga interminable, todo siendo observado por un corazón que se desgrana. La ausencia de la vida, del vivir de manera concreta y real, la permanencia, ese presente que suele desvanecerse y que finalmente quedara como una fotografía color tipo Kodak o en sepia si es más agritudo.
Todo concuerda, todo se conecta y desconecta a la vez, lo que convive con esas historia escritas en verso libre que por momentos se escapan hasta la otra orilla del mar. Se muestra un afán estético claro y desordenado, ansioso y disperso como son estos tiempos actuales donde nos perdemos entre redes sociales y contraseñas olvidadas. 
A veces falta el aire para respirar y estarse quieto por un momento, tratar de captar el silencio ya casi desaparecido en estas tierras, tal como las libélulas y las pulgas de mar. 

Dale una vuelta a este poemario y si te encuentras en Valparaíso, podrás quizas notar esos bordes azucarados que son la conexión y concepto de esta escritura.


Raúl Cabrera Hidalho
Julio 2018.





miércoles, 10 de enero de 2018

Un Altar de Cruces Invertidas






EL POSEÍDO

Dicen que estoy endemoniado
O influenciado por un espíritu obscuro
Nunca tuve la vida resuelta
Eso es todo
Descarrilando siempre
Entre infecciones
Parásitos
Y algo de rock’n’roll.

Las decisiones
Nunca estuvieron de mi lado
Quizás como buen penitente
Me dejé llevar por esa marea sugerente y nocturna
Que forma estereotipos
Vanidosos y etéreos
Esperpentos
De lunas ciegas.

El carácter
Lo fui deformando
Desde las planicies interiores
Para llegar siempre al mar
Con su aliento de espinas
Y coronas de velatorios
Podría decirse
Que estoy perdido
O que cogieron mi corazón
Con unas tenazas
Lo cierto es que dejé todo tirado
Tras los pasos fríos del hastío
A veces sueño
Con los cuentos familiares
Las camisas de fuerza
Y la magia desgranada
Por la incontinencia
Que empujaba fuerte
En las horas eternas del desvelo
Caer al negro y reincidir
Esa es la cuestión.

Eje de todos los altares
Donde alguna vez me incliné
Como buen samaritano de las orfandades
De las cruces invertidas y otros símbolos estrafalarios
Que de vez en cuando invoco.


Raúl Cabrera Hidalgo.

(Tomado de poemario "Punk New Wave", 
el que se presentará en Febrero 2018)








lunes, 8 de enero de 2018

Escritos Urbanos, Valparaíso 2018





EN LA HOJARASCA MÍSERA DE LA URBE

Súbito espasmo
Corres desenfrenado
Sobre el arisco cobijo que te atormenta.
Nave trémula que desafiaste
La desaprobación infesta del carácter
Como podrías
Encantar este temporal
En la hojarasca mísera de la urbe.
Los contornos se desfiguran
Mientras un palpitar comienza su hibernación
El arrebato se confunde
Entre caricias
El viento sopla sin dirección aparente
Cuchillos cuelgan desde una soga
La bestia se queja odiosa
Quisiera salir
Arrastrar toda la debacle
Hasta el descanso
De los ángeles moribundos
Oscurecidos los sueños
Vagando en el plano agridulce
Cavernarios rezan entre esquinas y callejones mojados
Sinuosos prospectos
Intentando ganarle a la vida
Como se dice de costumbre
Hombres con rostros de piedras
Quemados
Entre el pavimento húmedo y las cornisas
Que caen sulfuran agrietan
Vida de perros y mierda de ratones.
Cagarruta.


Raúl Cabrera Hidalgo.

(Adelanto nuevo poemario, "Cabritería" 2018)


domingo, 27 de abril de 2008

Entre la Cercanía y la Ruptura.




Después de un determinado tiempo de distanciamiento de mí parte para con este blog, que justamente fue creado para mostrar mis escritos, estoy de regreso para entregarles ciertas 'pequeñas cositas' que fueron parte del poemario "Cercanía" que escribí el año 2004 y que permanece inédito como todo mi trabajo que podríamos llamar literario, en su momento encontraba que este poemario era muy instrospectivo y profundo, pero con el paso del tiempo lo siento mas alocado y heterogéneo, debo decir que por esos años pasaba por momentos un tanto traumáticos como pueden ser la muerte y las grandes espectativas tiradas al tacho de la basura.
Ante la espera de un inminente nuevo poemario que llevaría por título "Palabras que Corren Muebles" y otro que recopila mi corto bagaje por las letras macilentas llamado "Dias de Ocio en el País del Olvido" que pronto tendré listo y os entregaré a través de este espacio, les dejo con estos retasos de algo que creo verdadero, prometo a todos una mayor disciplina y continuidad de textos.





EN LA UNION DE LOS CUERPOS


En la union de los cuerpos
veo esa luz esquiva,
cuando lentamente
siento tu cuerpo
llover sobre el mío,
entiendo porque
las estrellas enfrentan su orbita
con tal decisión,
entiendo porque
los pájaros vuelan y avanzan
supuestamente sin rumbo,
inalterables.

En el calor espeso
de dos cuerpos amantes
está el gran impulso,
el movimiento más certero.
Lo único que de verdad
sentimos al quemarnos,
ahí esta la vida
o su razon.




FUTILIDAD

Habitar infiernos
cargando al difunto.
La cruz encendida
que pesa como la vida.
y luego
llega la primavera,
la niña feliz.

El hombre llora
y la flor nace
bajo un cielo azul.
Tras el cristal adornado,
el difunto
perece ante el sol.



ME ALIMENTO DE MIS DOLENCIAS

.....y si Alemania gritó dolor,
¿por qué Europa no puede
reir a los pies de un príncipe.?

Sonido negro cavernoso
ruidos que dañan
lentos y profundos.

La naturaleza esta muerta para mí,
como buen hijo
le doy la espalda.
La ignoro por respeto a mis dolencias.
todos sangramos,
pero no nos importa.
nunca importa.
la perdida.
la caida.

Me alimento de mis dolencias,
mis ojos.
mi pan.
mi vida.



DICEN QUE ME DORMÍ

..........vaya,vaya.
a quien tenemos aquí.

Dicen que la vida pasó fugaz
tal como llega la muerte en su carruaje sin tiempo.
Dicen que me dormí niño
y desperté escoria con un saco repleto de cruces rotas.
Dicen que el retrato de mi madre se pudrió
y que mi padre viajó
a lejanos paises con su contrabando
de palabras vacías.

Dicen que cayeron
aquellos viejos edificios
que escondian bares y burdeles
donde me acogieron y me quisieron
como en un hogar verdadero.

Yo no creo las habladurias
de poetas o iniciados,
prefiero escuchar al niño
que mora tras este disfraz antiguo.
Él es el unico que me quiere bien
y no me esconde
ninguna carta marcada.



MORIR

Los dias se van desocupando
de vida.
Sólo van quedando
unas viejas maquinas de escribir
tiradas
en el pavimento negro
de la calle Condell.
Inservibles
como una vida perdida,
como un cansancio
que se oxida
en cada movimiento de una melodia baja.

Son sólo las mañanas
sobre las hojas verdes
las que importan
en estas lejanias.



CUANDO CAIGA LA MUERTE

Cuando la muerte caiga
negra y pesada
de seguro
traerá silencio y pudredumbre.
Extraño ciclo,
mil televisores descompuestos.

Cuando la muerte caiga
de seguro yo no estaré ahí.
me quedo con las flores,
con los árboles
siempre verdes y amigos.

¿Acaso desapareceran
alguna vez
las fotos familiares
en las mesas de centro?.




CAER

Vean
como lloro
cada peldaño de vuestra condena.
La vida y su escala empinada.
Recorrer la vida,
tropezar cada uno de sus rincones.
Peregrinar,
hacia una imagen,
hacia un templo vacio.
y los espejos
haciendo su trabajo en la caida diaria.

¿Qué es más triste que un buen recuerdo?

Quizás sólo el sol imprudente
que irrumpe en mi refugio
para mostrarme el reflejo
de lo que nunca quize ser.




DISTINGUIR

Tuberia metalica cilindrica.
Conducto oxidado
por donde corre el supuesto torrente poetico.Quizás un rio demasiado contaminado.

¿Quién lo conduce?

Saber cómo.

¿Por qué tanta vanidad?

¿Por qué tanto poeta?

La lluvia sólo cae,
creando difusas formas en los charcos.
donde mojo mi cara
queriendo buscar una respuesta
que no recuerdo.

¿Quién conduce el torrente?

Sólo el alma.
Sólo la sangre salpicada sobre la hoja.
como las lágrimas de aquél niño
a quien no recogieron despues de clases.

Sus palabras.



DE LA ILUSION

Me refiero a la aridez
de un cariño de manos
de un beso menor.
Menor que una sonrisa
que una mirada.
De la ilusion
que yo sentí
al conocerle,
y ver esos colores forasteros
que murieron oscurecidos
junto a mis dias.

Latigos.
Enfermedad.
Pudricion de una ilusion.

La decepcion,
lo que todos vivimos.




AL FINAL

No hay nada más esperanzador
que un mendigo.

No más victorias
ni pérdidas
sólo cansancio.

Nada más.

¡Una pregunta para el astuto lector!

¿Hay algo más?




Raúl Cabrera Hidalgo.






domingo, 10 de diciembre de 2006

En el Día de la Muerte de Pinochet.




En el día de la muerte de Pinochet, una de las grandes verguenzas patrias. Comienzo este blog dedicado a la difusión de mis escritos, Poesía de Interiores.

En los tiempos del dictador se vivía extrañamente, un miedo acallado cubría los días de infancia, fue muy especial ir conociendo el mundo, sorprenderse por la belleza de las cosas y a la vez convivir con un momento histórico tan hostil donde los asesinatos, las desapariciones, la censura y la pena eran algo normal, viví una extraña dualidad, que sin lugar a dudas tiene mucho que ver hoy con mi escritura, como lo dice la siguiente poesía, incluida en mi poemario "Herirte", 2006.




DIAS GRISES Y UN CRISTO ROTO

Dónde quedaros los estandartes,
las tonadas,
los huasos "bien",
aquellos huasos
que cuando niño me hacían temblar.


Tal como los Carabineros de Chile
y las bombas puestas en cualquier parte.
Según decía lo establecido
en la dictadura de Augusto Pinochet Ugarte.
Cuando los días solían ser grises
y los temporales arreciaban por semanas,
cuando el miedo reinaba
y las personas eran no más que meras formas diminutas
tratando de sobrevivir.
Agazapadas,
calladas,
pobres,
tristes,
ningún cuento por contar.


Bajo ese prisma crecí
y lamento decirles
que mi huérfana escritura bebe
de esa fuente ensangrentada,
mis palabras avanzan
con una lápida anónima
en los ojos.


Oh
país gris!
Nefasto.
Cuántas vidas rotas
cobijas en tu territorio.
No eres más que una gran herida,
que sangra
sobre todas las hojas que se han escrito
en tus llagas.


Eres un Cristo Negro
que no resucitó,
que no era un cuento.





MURMURAR OTOÑO


Me deslizo en un ramaje espeso,
habito un gran arból
que no para de expandirse
en todas las direcciones.
Y si he visitado
todos los países que moran en mí,
ha sido sólo por desdeñar.
Una sonrisa cayendo con indolencia,
una nueva mañana mustia
entregándome ese legado matutino
que tan mal me hace.
Por ser,
por los pasajes sin regreso,
por este Hoy
que no reconozco.


Siento que se me cae la vida,
mientras las calles
comienzan a murmurar otoño.
Pensé que la poesía
me salvaría
y no encontré más
que unas cuantas hojas manchadas
con chistes repetidos.
Osamentas de algo
que alguna vez valieron
un par de jos y una vida.
Una elegante despedida
tras la última caricia fatua.





TRISTE LLUVIA ACANTILADO


Triste lluvia acantilado
como un poema
profundidad
equilibrio
muchos significados en juego
y siempre a punto de caer.


Triste lluvia acantilado
oscuridad
como un deseo oculto
la veracidad de una mirada
de un movimiento
y siempre todo en juego
vivir o desaparecer
mantener el equilibrio.



Raúl Cabrera Hidalgo.